Hoy recorremos los principales yacimientos arqueológicos de la isla pitiusa destacando sus principales características y paradas obligadas. Ante vosotros la Ibiza fenicia, cartaginesa y romana.
La isla de Ibiza es el resultado de la amalgama de las culturas existentes en el Mediterráneo en época Antigua. Desde huellas fenicias pasando por los cartagineses hasta los romanos. Todo ello nos invita a recorrer sus páramos en busca de los excepcionales yacimientos arqueológicos legados hasta el día de hoy. Descubre con nosotros la ‘Ruta Arqueológica de Ibiza’ y sus magníficas paradas para disfrutar de la isla más cultural.
Necrópolis Es Puig des Molins (Museo y Necrópolis)
Comenzamos la ruta arqueológica por Ibiza con la necrópolis Es Puig des Molins. Es, sin duda, la más importante para el estudio de la pisada fenicia de la isla, siendo una de las necrópolis mejor conservadas y de mayores dimensiones conocidas hasta la fecha. De hecho, se considera uno de los conjuntos funerarios más importantes del Mediterráneo occidental ya que sirvió como cementerio de la ciudad de Ibiza durante toda su época Antigua.
Situada a quinientos metros al oeste del Puig de la Vila, en las inmediaciones de la ciudad, fue fundada a finales del siglo VII a.C. por los mismos fenicios. Un hecho asiduo de la cultura fenicia es encontrar el espacio de los vivos y de los muertos uno al lado del otro.
Por lo tanto, la necrópolis ya estaría en funcionamiento desde finales del siglo VII a.C., en este caso, por los fenicios y mantuvo su actividad en épocas púnica y romana. En estas dos últimas la necrópolis sufrió un crecimiento considerable.
Actualmente, el espacio se encuentra cubierto por una capa de vegetación y es complicado el estudio total de la necrópolis. Se calcula que solo con las sepulturas de época púnica, los conocidos hipogeos, habría unas 3.000. Sin embargo, solo son visibles desde el exterior 340 sepulcros, excavados en roca y llamados hipogeos de la mula.
A todo esto, se suma la existencia del Museo de Puig des Molins como centro de interpretación donde podréis profundizar en el conocimiento de la necrópolis así como entender la concepción de la muerte en la Antigüedad.
Poblado fenicio de Sa Caleta
El poblado Sa Caleta, situado en la costa de la isla, es uno de los asentamientos estables que se fundaron con la colonización fenicia y está declarado Patrimonio de la Humanidad desde 1999.
Su mera existencia permite el estudio y comprender la fase más tardía de la colonización fenicia de la isla de Ibiza. Todo apunta que fue un núcleo estable con unas dimensiones importantes. Su origen se remonta al siglo VIII a.C., pero sería en el siglo VII a.C. cuando se amplía con la nueva llegada de comunidades fenicias (procedentes de la península Ibérica). Finalmente, se cree que se abandonaría entorno el 590 a.C. de forma pacífica.
Sa Caleta, según las excavaciones, fue un poblado urbano heterogéneo con construcciones, edificios, midas y formas diferentes, con un tramo más bien irregular. Al oeste de la llamada Mola de sa Caleta encontramos un puerto de pequeñas dimensiones, seguramente también fundado por los fenicios. Hay que tener en cuenta que, debido al paso del tiempo, el tramado y espacio del poblado se ha visto afectado por la erosión del terreno provocado por la llegada del agua del mar.
Debemos pensar, sin embargo, que es gracias a Sa Caleta que se puede documentar la colonización fenicia de Ibiza. En un primer momento, este poblado, serviría como base comercial con el mercado peninsular y mediterráneo central, y que más tarde se abandonaría con un traslado poblacional a la bahía de Ibiza, surgiendo la ciudad que se conserva en la actualidad. Es por eso que es un indispensable la ruta arqueológica por Ibiza.
Yacimiento arqueológico de Ses Païsses
Para conocer la huella de la época púnica y romana es imprescindible visitar Ses Païsses, siendo un asentamiento rural de mediados del siglo V a.C. que permaneció ocupado hasta el siglo VIII de nuestra era.
Encontraremos un edificio relativamente grande, con el propósito de vivienda conjunto al desenvolvimiento de actividades agrarias. Un segundo edificio, en un estado de conservación peor que el anterior, junto con dos necrópolis, una púnica y otra bizantina respectivamente.
En el siglo I el asentamiento adquirió las dimensiones propias de una villa romana, con distintas dependencias organizadas en torno a un patio cuadrado central. Algunas de estas son: la puerta principal al sur, las cocinas, los dormitorios y la sala del molino, entre otras.
Mientras que las necrópolis diferenciamos una mucho más tardía que la otra, la púnica, y una más moderna. La primera se compone de veinte sepulcros de hipogeos con sus respectivas ajuares. Desde la parte superior se podrán observar dos fosos de época bizantina con una vista privilegiada del entorno natural, destacando el islote des Vedrà.
La cueva de Ses Fontanelles, Cova del Vi
Todo lo contrario, a los senderistas os recomendamos la ruta con destino a la Cova de Ses Fontanelles, también conocida como la Cova des Vi (Cueva del Vino), ya que tuvo la función citada gracias a sus refrescantes paredes que ayudaban a la conservación del producto.
Esta cueva ha sido catalogada como la “Altamira Pitiusa”, encontrándose una serie de pinturas rupestres en sus profundidades. Sin embargo, el trazado de las pinturas permanecen poco visibles y tenemos que ir con sumo cuidado para identificarlos. Todo apunta que los gravados se realizaron en la Edad del Bronce, y fueron descubiertas en 1917 por el arqueólogo francés Henri Breuil.
El destino es la Cova de Ses Fontanelles, podrás ir disfrutando del paisaje natural y etnográfico de Ibiza, sobre todo con la presencia de los acantilados y, al final, observarás los islotes de poniente, la bahía de Sant Antoni y la costa de Cala Salada.
Siguiente parada de la ruta arqueológica por Ibiza: El acueducto de s’Argamassa
Cuando hablamos de acueductos pensamos en los de Tarraco o Segovia, pero estas obras de la ingeniería romana también las encontramos presentes en Ibiza.
El acueducto de s’Argamassa es una obra realizada en época alto imperial romana ubicada en el municipio de Santa Eulària, entre sa Trenca y Cala Martina, y se abandonaría entre finales del siglo I o inicios del II de nuestra era. La obra industrial se encuentra en una zona con construcciones turísticas, quedando la infraestructura disimulada en el entorno urbanístico.
Sin embargo, el acueducto de s’Argamassa es un monumento romano de gran importancia, formado por un conjunto de piedras que permitía la canalización y conducción de agua, junto con elementos que permiten atestiguar la existencia de una zona industrial destacando hasta un asentamiento marítimo-rural.
Es un acueducto longitudinal que conecta la zona urbanística actual con el mar, perdiendo altura en la parte norte hasta tocar el suelo. A la medida que llega al Mediterráneo se separa en dos direcciones, este y oeste.
Según el estudio de las fuentes antiguas, el acueducto, aparte de su función inherente, serviría para vaciar el agua inundada en las minas de s’Argentera en época altoimperial romana.
Yacimiento arqueológico Sa Penya Esbarrada
Siguiendo las recomendaciones para los senderistas y continuando nuestra ruta arqueológica por Ibiza, recorremos el Pla de Corona, en la población de Santa Agnès, donde podremos llegar hasta el yacimiento arqueológico de Sa Penya Esbarrada.
Un lugar enigmático comprendido entre dos acantilados con puestas de sol en verano, con unas vistas privilegiadas a las islas Ses Margalides, donde el mayor incorpora un arco natural.
Llegados al yacimiento arqueológico se pueden observar los restos de una casa rural de época musulmana que permaneció ocupada hasta el siglo XII de nuestra era. Aunque el recinto se encuentra actualmente cerrado por una valla, la casa es visible desde el exterior. Observaremos una construcción de planta rectangular, con un patio de grandes dimensiones central y distintas dependencias alrededor de este mismo.
Con la conquista cristiana de la isla de Ibiza en 1235, la casa se llegó a abandonar de forma definitiva hasta el día de hoy.
Si bien como yacimiento arqueológico no es de los más impresionantes, nos ofrece una etapa senderista de las más bonitas de la isla. Además, se puede parar a la pequeña taberna Las Puertas del Cielo donde identificaremos un mirador natural y un sitio de descanso. El nombre del local se debe a los dos acantilados contrapuestos que simbolizan unas puertas con perspectiva hacia el cielo.
Centro de interpretación Medina Yabisa
A banda de yacimientos y rutas naturales, podemos disfrutar de la Ibiza cultural a partir de sus centros de interpretación. Uno de ellos es el centro de Interpretación Medina Yabusa, el cual ocupa parte de una antigua casa de la calle de la Curia de Dalt Vila, junto con los baluartes de Sant Jaume y Sant Pere, justo delante de la catedral de Ibiza. Además, acompañado de una oficina de Turismo a tu disponibilidad.
El Centro Medina Yabisa es un proyecto que tiene como objetivo la musealización de la época musulmana de Ibiza, ayudándose de pantallas dinámicas, fotografías, imágenes, replicas y restos arqueológicos de esta etapa. Además, de poder observar de forma presencial parte de las defensas de la muralla árabe, es decir, de la antigua medina.
La actividad que más destaca es observar una maqueta audiovisual que nos enseñará la evolución de la medina Yabisa.
Ruta Torres d’en Lluc
El próximo yacimiento que hablaremos es Ses Torres d’En Lluc, situado entre la abrupta ruta que conecta Sant Mateu y Santa Agnès, muy cerca de los acantilados de Cala d’Albarca. Un misterioso yacimiento que los expertos datan entre la etapa paleocristiana hasta Alta Edad Media, formado por un tramo de muralla que une dos torres de planta ovalada.
Se sabe que el yacimiento actual formaba parte de una fortificación de dimensiones relativas, aunque existe un debate abierto sobre sus orígenes.
Algunos especialistas defienden que sería una defensa montañosa debido a los ataques de los piratas de esa época. De esta manera, además, desde Torres d’En Lluc se tenía y se mantiene una vista privilegiada de la bahía de Cala d’Albarca, uniendo con Racó Verd por la izquierda.
Hay que advertir que, aunque se puede llegar relativamente cerca en coche, el último kilómetro se tiene que realizar a pie y el yacimiento no se encuentra debidamente señalizado. Aun así, el paisaje natural que nos ofrece junto a los misterios del yacimiento hacen de el uno de los lugares más recónditos de Ibiza.
Centro de interpretación Sa Capelleta
Para finalizar nuestra ruta arqueológica por Ibiza, dejamos a vuestro interés el centro de interpretación de Sa Capelleta, ubicado en la calle del mismo nombre. En el interior se puede observar la ocupación del espacio de tres etapas diferenciadas.
La primera data de época púnica, seguido de una etapa romana, encontrándose enterramientos hasta que se convirtió en una necrópolis datada entre los siglos II y IV de nuestra era. La necrópolis romana consta de 40 tumbas con enterramientos basados en la inhumación con ajuares humildes. Por último, la tercera se conforma de un importante yacimiento de época musulmana con un rabal de tramando urbanístico fuera de las murallas.
Los restos de la etapa islámica permiten el estudio de las fuentes escritas, sobre todo de la crónica que narra la cruzada pisano catalana del 1114 de Ibiza, la cual pone de manifiesto el saqueo de un rabal extramuros y que, seguramente, sea el barrio que se encuentra en Sa Capelleta.